El 11 de junio de 1997 fallece en Caracas en olor de santidad el p. Luis María OLASO JUNYENT, adalid de los Derechos Humanos y formador de generaciones de abogados, menudo de cuerpo y grande de espíritu. Nació en Pamplona, Navarra, el 05.08.16. Interrumpe la carrera de abogado para tomar parte en la guerra civil española 1936-39. Ejerce de Registrador de la Propiedad en Tenerife y en Santander e ingresa en Loyola el 22.04.42. Humanidades en Orduña, Filosofía y Teología en Oña, Magisterio 1949-50 en El Salvador de Zaragoza. Se ordena el 30.07.53 en Loyola, España, por Zenón Arámburu, Obispo de Wuhu. 3ª Probación en Gandía.
El 11.09.55 llega a Venezuela y revalida en la ULA el título de abogado
(1958). Últimos votos el 15.08.59 en Caracas ante Cándido
Mazón. En la
UCAB: dirige la
Escuela de Letras de la que es miembro fundador (1955-58),
funda y dirige la Escuela
de Psicología (1957-59), ejerce como director de la Escuela de Derecho
(1958-68), imparte diferentes disciplinas, especialmente Introducción al
Derecho y Filosofía del Derecho, tanto en la UCAB como en la
UCV. Sus libros, que tienen múltiples ediciones,
son texto oficial de carrera. También fue Decano de la Facultad de Derecho de la UCAB (11.02.81- 03.11.86)
cargo del que se aparta de forma voluntaria. En la Parroquia Universitaria tuvo desempeños como
Auxiliar o Vicario Cooperador (1969-77) y Párroco (nombrado en 1982), siendo
Asesor del MUC, Director del ‘Movimiento por un Mundo Mejor’ y consejero
matrimonial. Nombrado Director de DD. HH. de la Fiscalía General
de la República,
ejerce este cargo de 1990-96. Durante este tiempo el Padre Olaso estuvo
presente en toda clase de problemas relacionados con los Derechos Humanos, ya
fuera con víctimas de la violencia policial, comisarías, atropellos a las
etnias indígenas, y especialmente las cárceles, que visitó en las situaciones
más conflictivas. Se convirtió en paladín de los derechos de todos los
oprimidos. Entre otros muchos galardones recibe el 11.12.96 la Orden del Libertador.
Aquejado de leucemia, disminuye paulatinamente su actividad, hasta su muerte
acaecida en la Enfermería Provincial.
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